VUELTA A LOS ORIGENES

Después del bajonazo que traje de NY y que todavía me dura, tengo que reconocer que estoy en una forma fantástica, entrenar y sacrificarte para hacer una maratón y ni siquiera estrenarte, pues he conseguido estar fresca y lozana, para cualquier carrera que afronte, así que me he obligado y apuntado a dos carreras que se celebran todos los años y que si hubiese corrido en NY no las hubiese realizado.

Ayer corrí la Herri Krosa de Bilbao, hacia unos años que no participaba en ella y tengo que reconocer que es una carrera más para disfrutar que para correr, por los miles de corredores, cercano a los diez mil que corrimos ayer y por el tipo de corredor que afronta los diez kilómetros de esta carrera, además muchas familias que la hacen por tramos, los niños, participantes que solo corren esta carrera al año, en fin, que es una fiesta del deporte que tiene, su salida y meta en plena Gran Vía bilbaína.

Había que celebrar su veinticinco edición, esta carrera ha sido el inicio en las carreras y en el atletismo de cientos de corredores que hoy poblamos los circuitos. Veinticinco años celebrandose y donde hemos pasado de la camiseta dorsal  blanca de algodón a la técnica, pero eso si, siempre blanca con el dorsal para que todo el mundo sea igual, ya que en esta carrera no hay premios ni clasificaciones, todos somos finisher, a todos se nos entrega el mismo premio,y cada uno a su manera, los que completamos los diez kilómetros, los que hacen sus primeros cinco, los últimos tres, los más jóvenes, los mayores, etc., el caso es participar, correr y sobre todo divertirse y vivir una mañana de deporte popular.

A mi me encanta el inicio de la carrera, no se da pistoletazo, ni la traca de cohetes, no, aquí siempre se comienza con la banda sonora de una película, yo he salido, con la guerra de las galaxias, piratas del caribe, superman, etc., este año se repitió por primera vez una melodía y fue carros de fuego, ya que fue la banda sonora que dió la salida hace veinticinco años a la primera edición.

Nosotras en nuestra linea, a disfrutar corriendo, aunque había muchos tramos donde adelantar era imposible, ya que se hacían cuellos de botella y muchas veces era peligroso, por las aceras ó por la zona de vías y conos, así que pasito a pasito fuimos haciendo el recorrido y teminndo en 51'06", los últimos tres kilómetros a toda leche, debido a la tromba de agua que cayó, fue poco tiempo pero suficiente para calarnos y que al llegar a metas mis zapatillas hacían.....txof,txof.

Hice la carrera con Gloria y su hija Teresa, no hay que decir que Teresa, llegó a meta antes que nosotras......¡¡Bendita juventud!!.

 Tardamos unos cuatro minutos en salir, miles de corredores por delante y por detrás, saludabas a gente conocida, a las cámaras de foto, etc., todos protagonistas.

Este es el trofeo que nos dieron este año.